Marcela Trujillo, mejor conocida como «Mailiki», es pintora,ilustradora y una de las primeras exponentes del cómic autobiográfico chileno. Sus trabajos son narraciones visuales que abordan sus propias experiencias y anécdotas. Descubre en #MásAlládelaObra cómo sus referentes influyeron en la creación de sus pinturas e historietas.
Descríbenos tu práctica artística
Me veo como una narradora visual, quiero contar historias con mis dibujos y pinturas, cosas que me pasan y otras que imagino. Me he aferrado al lenguaje del dibujo desde pequeña, donde inventaba escenas llenas de personajes, creando mundos atiborrados de detalles que salían de mi cabeza.
Estudiar arte me enseñó a observar y reproducir lo que veía frente a mí, a medir con los ojos, dibujando y pintando cada detalle con minuciosidad. Mi práctica artística consiste en mezclar ambos lenguajes: inventar y reproducir. En mis pinturas invento mundos y reproduzco materialidades y texturas. En mis cómics reproduzco mis experiencias de vida e invento personajes y escenarios para transformarlas en dibujos. Tanto en pintura como narrativa gráfica, cuento historias con imágenes, las que se me ocurran, las que necesite contar.
¿Cuáles son tus referentes artísticos más importantes y por qué?
La Pequeña Lulú me enseñó a representar la diversidad humana a través de la creación de personajes, Robert Crumb me empujó al mundo del cómic para adultos y me hizo sentir que yo era una artista underground, Julie Doucet me convenció que debía dibujar mi vida, sobre todo lo que no me atrevía a hablar, Andy Warhol me enseñó a ver arte en todo, Pedro Almodóvar me enseñó a valorar la estética kitsch, Juan Domingo Dávila me hizo entender que la pintura podía ser un territorio de rebeldía, un lugar donde tensionar lo establecido, Frida Kahlo me ayudó a valorar el autorretrato, Joe Coleman me ayudó a apreciar la obsesión por el detalle técnico y la cultura freak, Larry Pittman a usar colores fluorescentes y elementos gráficos en mis pinturas, Neo Rauch me mostró que la narrativa visual puede ser ilógica e instintiva.
¿Cómo han influido en tus procesos creativos y en tus obras?
Las historietas, la publicidad y las ilustraciones de libros infantiles y educativos son elementos fundamentales de mis referentes gráficos, el mundo de la imagen reproducida es mi biblioteca de ideas desde donde invento mis series que se transforman en exposiciones. Los cómics independientes me enseñaron que el dibujo no pertenece a la infancia y que a través de él se puede comunicar infinidad de temas que pertenecen a la adultez, con humor e ironía.
El arte pop me hizo descubrir la ironía en el arte, un elemento que atesoro y agradezco porque me permite jugar con los conceptos para que las imágenes tengan muchas lecturas. Los artistas underground y políticamente incorrectos me dan valor para entrar en temas que son difíciles de tratar en la vida real, pero que se hacen digeribles a través del arte, los artistas contemporáneos que trabajan la narrativa visual me dan confianza de que la pintura es un medio actual, vigente y llena de posibilidades.Yo creo que estos referentes están presentes en el cómo me he ido definiendo como artista.