«Garrido traduce en sus collages su imaginario interno, plasmando una explosión de ideas que transitan por lo mítico-religioso, la naturaleza, el cuerpo, las artes, la historia y las tradiciones simbólicas de diversas culturas«.
Constanza Güell
Descríbenos tu práctica artística
Soy un narrador que escribe en códigos. Creo relatos, caminos y alucinaciones lúcidas transitables. Mi lenguaje artístico ha pasado por numerosos formatos. En todos ellos he articulado una manera de relacionarme con mi realidad, interna y externa, a través de lo psíquico y del estudio en detalle de los numerosos intereses de mi obsesión. Creo que el collage ha sido el mejor método para escoger lo que me gusta del mundo y traspasarlo a mi obra.
En el caso de los collages hechos con papel, hay una serie de rituales previos que paso a paso me llevan a la creación final de un cuadro . Primero está la recolección o cacería de papeles, que es una de las partes más divertidas : buscar libros con ilustraciones en el Bio Bio, en la calle San Diego, en Venecia, Beijing, Estambul o en una feria de barrio. Luego viene lo que yo llamo el casting, que es elegir entre las ilustraciones mi elenco para cada pieza. Y después vienen los estados de trance : Cortar y Componer, que para mi son el equivalente a dibujar y pintar.
¿Cuáles son tus referentes artísticos más importantes y por qué?
Mis referentes son muy numerosos, van de la plástica al cine, la literatura, los comics, la historia, la mitología y la arqueología. En plástica desde muy chico estuve obsesionado con la obra de El Bosco. Aún lo estoy.
El trabajo de Leonora Carrington me vuela la cabeza y los collages de Max Ernst son alucinantes, los que vine a conocer mucho mejor hace poco tiempo, aunque ya amaba desde siempre sus pinturas.
Y hay un gran dibujante de comics argentino, que es la única colección seria que tengo, que es el rarísimo y surrealista Carlos Nine.
¿Cómo han influido en tus procesos creativos y en tus obras?
Al hacer collage siempre estoy incluyendo el trabajo de otros artistas, miles literalmente. Me alimento todo el tiempo de las imágenes que encuentro en diversas fuentes. Con la obra de El Bosco, por ejemplo, he estudiado a fondo la idea del tríptico como sistema de representación simbólica, realizando numerosas versiones de ellos, aunque siendo sincero, el mejor lugar de inspiración para mis obras viene de lo que sueño. Es la fuente más pura e infinita del arte.