El arte y la cultura se han vuelto una necesidad y una válvula de escape para todos quienes nos hemos tenido que adaptar a esta “nueva realidad”. Como una institución que busca generar un impacto colectivo, Antenna se proyecta como un catalizador de relaciones entre personas con un mismo objetivo: fortalecer el ecosistema del arte en Chile.

Texto Alejandra Villasmil, Artishock

Antenna se ha consolidado como una organización que propone nuevas maneras de acercar y expandir el arte en Chile, a través de una comunidad filantrópica, un área de proyectos y asesorías que reúnen al mundo público y privado, y canales de comunicación digitales gratuitos y transversales.

Desde su creación en 2015, Fundación Antenna ha desarrollado una serie de programas que han logrado poner en sinergia las esferas pública y privada en torno al arte con resultados tangibles, teniendo como escenario de intervención un país con una cultura indudablemente rica, pero cuyos mecanismos de circulación y puesta en valor han sobrellevado por décadas ciclos marcados tanto por la estagnación como por un resurgimiento en constante búsqueda de autosustentabilidad.

Confluir en el diagnóstico de una escena local y en cuáles deberían ser los planes para apuntalar sus pros y dirimir sus contras ha sido el mantra de la cultura en Chile, sea en el ámbito de lo colectivo/comunitario -a través de espacios independientes, grupos de artivistas, gremios y otras asociaciones-, en el corazón de las micropolíticas del ejercicio individual, o como parte del diseño de las políticas públicas institucionales y de gobiernos de uno u otro cariz ideológico. De estos análisis una cosa siempre es conclusiva: la necesidad de crear redes de trabajo efectivas, pero también afectivas, capaces de transformar las mejores intenciones y las buenas ideas en acciones duraderas de amplio alcance.

Los fundadores de Antenna, Constanza Güell, Elisa Ibáñez y Alfonso Díaz, siempre han tenido una teoría al respecto:

“Si construimos y fortalecemos relaciones entre el mundo del arte, las personas, el mundo público y privado, tendremos una sociedad más conectada y participativa con el desarrollo cultural del país”.

Simple. Alcanzable, también, si se tienen claros los objetivos y cómo realizarlos. Es lo que podría llamarse construir con sentido de organización. También, saber detectar las oportunidades, encontrar quiénes son esos potenciales socios que comparten el mismo espíritu filantrópico y, finalmente, contar con la intuición que guía aquello que se persigue incluso como imposible, pero que se asegura con la convicción y la perseverancia.

En estos cinco años de andadura, Antenna ha aprendido que en el compromiso con el arte y la cultura no solo se involucran sus partes, es decir, la escena y sus actores, sino también toda la sociedad.

Esto se ha vuelto aún más patente después de dos hechos de la historia reciente de Chile que se sucedieron de manera solapada y en dimensiones espacio-temporales desbordadas: el estallido social del 18 de octubre de 2019 y, sin tregua, cinco meses después, una pandemia sin precedentes, que trasladó las calientes manifestaciones por una sociedad más justa e igualitaria desde las calles hacia las frías pantallas de nuestros dispositivos digitales.

LOS NUEVOS CANALES DIGITALES DE ANTENNA

El arte y la cultura se han vuelto una necesidad y una válvula de escape para todos quienes nos hemos tenido que adaptar a esta “nueva realidad”. Al igual que muchas otras organizaciones dedicadas al arte y la cultura, Antenna se ha reinventado y ajustado a los tiempos de pandemia mediante una serie de programas digitales, acortando así la brecha del distanciamiento físico.

Si hasta antes de la llegada del COVID-19 sus programas –como las sesiones privadas con sus socios o las visitas guiadas a exposiciones abiertas a todo público- eran presenciales, hoy se adaptan a las diversas plataformas virtuales con las que cuenta la organización, como su renovado sitio web, su cuenta de Instagram, un canal de YouTube, encuentros con agentes del medio a través de Zoom y una agenda cultural gratuita, transversal y colaborativa llamada Onda, lanzada este año.

En estos canales se difunden los nuevos programas que han surgido a raíz del COVID-19: Más allá de la obra, entrevistas por escrito a artistas chilenos como Catalina Bauer, Josefina Guilisasti o Máximo Corvalán-Pincheira, publicadas en el sitio web, y conversaciones, análisis y entrevistas compartidos por YouTube bajo las categorías de Revisión de portafolio, Obras ícono del arte chileno, y Art Talks Antenna.

CELEBRANDO CON IVÁN NAVARRO Y COLOMBINA PARRA

Para celebrar su quinto aniversario, Antenna traza un círculo simbólico que se completa en el punto de su creación, un 11 de agosto de 2015. Entonces, el reconocido artista visual chileno Iván Navarro compartía con aquellos primeros entusiastas de la naciente organización un recorrido por su primera retrospectiva en Chile, en la sala de arte de la Fundación Corpartes.

Cinco años después, este 11 de agosto a las 21:00 horas de Chile, se recordará la experiencia con una entrevista en vivo al artista a través de YouTube, a la que seguirá una obertura musical de la compositora y cantante chilena Colombina Parra, hija del antipoeta Nicanor Parra.

Navarro también presentará en la ocasión una obra inédita, Un río de Sangre, en la que interviene el mapa de Santiago, sus calles representadas por órganos, huesos y arterias. Con este trabajo, inspirado en una anécdota personal pero también en la canción homónima de la cantautora chilena Violeta Parra, Navarro invita a “recorrer Santiago como si fuera nuestro cuerpo, pues las luchas y protestas sociales se reflejan desde este lugar”.

“Cuando pensé en esta idea, recordé una experiencia que tuve durante el terremoto de 1985. Tenía 12 años y había dejado mi bicicleta en la botillería de la familia de una amiga. Cuando pasó el terremoto, fui a recoger mi bicicleta y en ese momento veo que desde el interior de la botillería empieza a correr lo que yo llamé en mi cabeza ‘un río de sangre’, que al final resultaron ser botellas de vino derramado”, cuenta.

A través de su sello Hueso Records, Navarro invitó a la sobrina de la propia Violeta Parra a colaborar en esta obra. “Le pregunté a Colombina si le interesaba trabajar conmigo y revisar esta canción. Comenzamos a hablar y se nos ocurrió que, de la misma forma en la que yo trabajé el mapa, ella podría comenzar a deconstruir la canción, hasta abrirla y crear una reinterpretación, la cual a su vez va develando fragmentos de la historia de Chile”, explica.

UN LUSTRO DE ALIANZAS Y PROYECTOS

En estos cinco años, Antenna ha reunido a más de 500 personas entre socios, colaboradores y alianzas, quienes han participado en más de 250 encuentros, dando a conocer el trabajo de más de 240 artistas en 125 espacios de arte, lo que ha tenido también como resultado la venta de más de 650 obras.

Ha establecido alianzas estratégicas para el desarrollo de proyectos con Indesa, Bank of America, Banco de Chile, EFG Bank, Grupo Patio, Gryphus, Casa Costanera, Credit Suisse y Falabella, entre otros, los cuales han tenido un impacto relevante en las artes y la cultura chilenas tanto dentro como fuera del país.

Entre ellos destacan la Bienal de Artes Mediales de Santiago, el envío deVoluspa Jarpa como representante de Chile en la Bienal de Arte de Venecia –la primera alianza entre el sector público y privado para impulsar la presencia chilena en este importante evento mundial-, y el desarrollo y edición de Obra Gruesa, el primer libro monográfico del reconocido arquitecto chileno Smiljan Radic, junto con Ediciones Puro Chile y Hatje Cantz.

Entre 2019 y 2020, fomentaron proyectos artísticos con Indesa bajo una óptica interdisciplinaria entre artistas, arquitectos y paisajistas con la que buscaban potenciar la relación entre personas, el entorno natural y la ciudad. Tras dos años de trabajo, los artistas chilenos Benjamín Ossa y Javier Toro Blum concluyeron una obra que otorga identidad al edificio emplazado en Augusto Leguía con Presidente Riesco, en Santiago.

Entre finales del año pasado y principios de 2020, y en alianza con la Bienal de Artes Mediales de Santiago, Antenna invitó a Bank of America a financiar una instalación sonora de la artista Nicole L’Huillier, chilena radicada en Boston y postulante a un doctorado en el MIT, que se expuso en el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) de Santiago. Asimismo, Credit Suisse financió la exhibición de los artistas suizos Roman Signer, Julian Charrière, Pauline Julier, Úrsula Biemann y Silvie Defraoui en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC), en Santiago, como parte del “Pabellón Suizo” de la Bienal.

En el ámbito público, Fundación Antenna ha generado alianzas de colaboración con el Ministerio de Cultura, las Artes y el Patrimonio, ProChile, Ministerio de Relaciones Exteriores, Corfo y la Municipalidad de Lo Barnechea.

Como una institución que busca generar un impacto colectivo, Antenna se proyecta como un catalizador de relaciones entre personas con un mismo objetivo: fortalecer el ecosistema del arte en Chile. Esta motivación está en la base del llamado modelo backbone foundation, implementado por aquellas organizaciones enfocadas en las necesidades del circuito cultural y en cómo potenciar el entramado de sus distintos campos de acción.